Además del alcohol, muchos otros factores también pueden causar hígado graso que usted no conoce.
El hígado graso es un problema de salud relacionado con la acumulación de exceso de grasa (grasa) en el hígado, que representa alrededor del 5-10% de su peso. Las dos consecuencias más básicas de la enfermedad del hígado graso son ralentizar su metabolismo y evitar que pierda peso. Puede curar el hígado graso adoptando hábitos de vida saludables y una dieta adecuada, además de usar terapia médica.
Los expertos clasifican el hígado graso en dos grupos:
- Hígado graso debido al alcohol
- Hígado graso no alcohólico
Para el primer grupo, la causa del hígado graso provino del alcohol. Entonces, en el otro grupo, ¿sabe cuál es la causa del hígado graso? Descubramos el artículo a continuación.
La principal causa de hígado graso que debe conocer
Hasta ahora, la causa de la enfermedad del hígado graso no alcohólico no se ha identificado claramente. Los expertos creen que la enfermedad ocurre principalmente cuando el cuerpo produce demasiada grasa y no es capaz de procesarla. Algunos estudios sugieren que una condición de salud subyacente aumenta el riesgo de desarrollar enfermedad del hígado graso no alcohólico.
A través de este artículo, SignsSymptomsList.com le presentará las 5 causas de hígado graso no alcohólico más importantes, que incluyen:
1. Obesidad
La obesidad es una de las causas más comunes de la enfermedad del hígado graso no alcohólico. El 70% de las personas con hígado graso tienden a tener sobrepeso.
La enfermedad del hígado graso afecta negativamente la capacidad del cuerpo para procesar la grasa y perder peso. Como resultado, tendrá problemas para devolver sus lecturas de peso a un nivel saludable. Si esta afección no se maneja bien, el hígado graso no alcohólico corre el riesgo de agravarse. A menudo, esto les sucede a las personas que comen alimentos poco saludables, incluidos alimentos con alto contenido de grasa y azúcar, y realizan poca actividad física.
2. Resistencia a la insulina
La enfermedad del hígado graso no alcohólico está asociada con la resistencia a la insulina. La hormona insulina ayuda a los músculos y tejidos a absorber glucosa (azúcar) de la sangre para obtener energía. Al mismo tiempo, también ayuda al hígado a almacenar el exceso de glucosa. La resistencia a la insulina significa que la hormona todavía se produce en el cuerpo pero no puede hacer el trabajo que se supone que debe hacer. La consecuencia de esta condición es que el exceso de grasa se almacena en el hígado y aumenta el riesgo de hepatitis o incluso cirrosis.
Fuente: Theconversation.com
3. Síndrome metabólico
La presencia de síndrome metabólico o cualquiera de sus características también es una de las causas del hígado graso no alcohólico. Se refiere a un conjunto de situaciones o características asociadas a la obesidad. Las personas con síndrome metabólico tienen más probabilidades de tener enfermedades cardíacas y diabetes tipo 2. Los médicos creen que una persona con síndrome metabólico puede tener tres (o más) de las siguientes características. Esto:
- Talla grande de cintura
- Índice de grasa en sangre alto
- Nivel alto de azúcar en sangre
- Hipertensión
- Colesterol bajo en sangre (HDL (colesterol de alta densidad o colesterol bueno))
4. Diabetes
Debido a la resistencia a la insulina, el páncreas puede comenzar a secretar más insulina. Sin embargo, con el tiempo, puede comenzar a producir menos de esta hormona que antes. Como resultado de esta condición, el exceso de azúcar se acumula en la sangre y conduce a la diabetes. Según muchos expertos, la diabetes tipo 2 es la causa más grave de la enfermedad del hígado graso no alcohólico.
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5. Exceso de grasa en la sangre
Los niveles altos de grasas, triglicéridos y colesterol LDL malo (colesterol de baja densidad) en la sangre también son una causa común de la enfermedad del hígado graso no alcohólico. Cuando el cuerpo se vuelve resistente a la insulina, el hígado comienza a tomar ácidos grasos de la sangre. Como resultado, estos tipos de grasas comienzan a acumularse en el hígado como grasa almacenada. Al mismo tiempo, tienen el riesgo de "matar" la capacidad del hígado para eliminar el exceso de grasa del cuerpo, desarrollando así la enfermedad del hígado graso.